martes, 17 de noviembre de 2009

EQUIVOCARSE PARA APRENDER



Hace unos días, una amiga del Foro (http://forocontigomismo.ning.com) publicaba estas frases de Rabindranath Tagore sobre la vida y el miedo a equivocarse. Y preguntaba mi opinión. No soy un visionario, sino alguien que, precisamente por sus múltiples y variados errores, empieza a saber descifrar de qué va la vida. No sé si lo he conseguido o si apenas lo conseguiré algún día, pero hoy solo sé que no estaría donde estoy sin haberme equivocado. Aunque debo admitir que en mi vida pasada hubieron demasiados errores ajenos que me afectaron y eso marcó en exceso mi camino. Hoy, en él, solo hay errores míos y propios... en algo he mejorado, sin duda! También sé que, entonces y ahora, me cuesta perdonarme a mí mismo por equivocarme, por ese mal hábito de exigirme demasiado o de sentirme culpable si no cumplo como debo! Pero sin duda es muy diferente cuando un presunto error es propio y tiene algún sentido, aunque sea para volver más firme a la senda perdida de mi propio destino. Porque perdonar o perdonarse, ¿no es amar o amarse, al fin y al cabo?

El hecho es que, de niños ni de mayores, no se nos enseña a gestionar el fracaso ni a aceptar que los errores son lecciones necesarias para nuestra vida y nuestro crecimiento! Demasiadas veces dejamos de hacer algo por miedo a equivocarnos, cuando al no hacerlo cometemos un mayor error, el no probarlo, intentando eludir vivir la vida que merecemos. Creo que la vida exije riesgo y que equivocarse es humano, aunque mejor equivocarse "con sentido", que hacerlo por un sin sentido como lo es el miedo, porque eso duele en el alma. En la vida, gracias a la libertad, tenemos siempre dos opciones, el amor o el miedo, o lo que es lo mismo, la confianza en nosotros mismos, en los demas y en la vida... o bien la desconfianza en nosotros mismos, en los demás o en la vida. Tu elijes en cada pequeña decisión, a cada paso del camino hacia tí mismo. Y equivocarse es un paso más, aunque, insisto, exigirá que te perdones a ti mismo por haberlo hecho y aprendas la lección que siempre trae consigo, antes de dar el siguiente paso, o te condenarás de por vida por tus propios errores y harás de ella un camino errado y de sufrimiento vano, propio y ajeno!

Pero un poco más allá, creo que todos deberíamos concedernos el derecho a equivocarnos, así como incluso a elejir cómo nos equivocamos, simplemente porque tenemos el inapelable derecho a aprender en nuestra vida. Y eso es extensible a los seres a quien amamos, a personas que queremos, incluyendo a nuestros estimados hijos, a quienes algunos padres no les conceden ni ese personal derecho. Si no erramos, no aprendemos, aunque a veces nos resulte muy duro reconocer los errores propios y ajenos o no tratar de hacer nada por evitarlos, propiciando el crecimiento... Hay que confiar mucho en alguien querido para observar desde la distancia y pasivamente su equivocación, su fracaso o su infelicidad... y creer firmemente en su derecho a crecer y en su propia capacidad de salir del atolladero y de volver a su propio camino hacia la felicidad! ¿No es eso, acaso, también amor verdadero? ¿Hay algo más hermoso que reencontrarse con alguien que se equivoca y saber que así está logrando día a día saber algo más de sí mismo y de la vida? Normalmente ansiamos compartir la felicidad, pero ¿no sería más frecuente y, a la vez, gratificante compartir los posibles errores para crecer ambos juntos?

El perdón es el primer paso en el amor... a uno mismo y a los demás! Perdonar no es más que olvidar el pasado incierto y temeroso para abrir una ventana al hoy y ahora firme y amoroso!

Aquí las mencionadas sabias sentencias. Saca tus propias conclusiones...


"No se equivoca el río cuando, al encontrar una montaña en su camino, retrocede para seguir avanzando hacia el mar.

Se equivoca el agua, que por temor a equivocarse, se estanca y se pudre en la laguna.

No se equivoca la semilla cuando muere en el surco para hacerse planta;
se equivoca la que, por no morir bajo la tierra, renuncia a la vida.

No se equivoca el pájaro que ensayando el primer vuelo cae al suelo; se equivoca aquél que por temor a caerse renuncia a volar por la seguridad del nido.

No se equivoca el hombre que ensaya distintos caminos para alcanzar sus metas; se equivoca aquél que por temor a equivocarse nunca acciona.

Pienso que se equivocan aquellos que no aceptan que ser hombre es buscarse a sí mismo cada día, sin encontrarse nunca plenamente.

Creo que al final del camino no te premiarán por lo que encuentres,
sino por aquello que hayas buscado honestamente.

El error más grande lo cometes cuando, por temor a equivocarte,
te equivocas dejando de arriesgar en el viaje hacia tus objetivos.

Rabindranath Tagore


¿COMENTARIOS, OPINIONES? PARTICIPA EN NUESTRO FORO DE OPINIÓN

http://forocontigomismo.ning.com/

 

Tell me when this blog is updated

what is this?