No hace mucho rato ha llegado un nuevo y hermoso niño a este mundo! Le llamaremos... Marc? ;-)
Alguien pensará que, por un par de días, no ha tenido la suerte de ser el primer bebé del nuevo año, que sería agasajado por todos y ya hubiera salido en la TV. Tampoco ha venido el próximo día de Reyes, como un enorme regalo de 3'8 kilos! Ni falta que le hace! Ha tenido la fortuna de nacer sano, en una familia, en un país... y en un entorno de amor! Aunque es verdad que todos los niños cuando nacen, lo hagan donde lo hagan, traen siempre consigo una sonrisa para los que les dan la bienvenida a este mundo!
Pero, sin duda, Marc ha sido el más grande y mágico regalo, porque ha devuelto la sonrisa a quienes ahora necesitaban volver a sonreir a la vida! Gracias Marc por llegar aquí, hoy y ahora, por recordarnos que la vida es importante en sí misma, que igual llega que se va, que dura lo que dura, que nosotros igual somos capaces de reir que de llorar... y porque una simple mueca tuya ha bastado para darle color a la vida de quienes te quieren y contigo están! Has nacido un 3 de enero, en un día de luna nueva, eres Capricornio, tendrás nombre de evangelista y el símbolo de un poderoso león, llegas en un año que será recordado por la crisis... pero tú eres mucho más que todo eso! Eres alguien que regaló una sonrisa a su mamá, a su papá... y a otros más que, aunque aún no te conocen o no los conoces, contigo están y estarán viéndote crecer, día a día! Ese es tu poder, tu alma pura, oculta bajo la fragilidad y la vulnerabilidad aparente de un bebé que llega llorando y con los puños apretados a este mundo loco, un lugar ni mejor ni peor de lo que te expliquemos los mayores y en el que tu deberás aprender a ser tú mismo, a amar a los demás... aunque para ello debas aprender primero a reir y llorar! Tu sola, involuntaria y muy reciente presencia, como un magnífico presagio, ya ha aportado felicidad a quienes te esperaban y ya te quieren!
Y es que la vida nos da la oportunidad de reir o llorar a cada minuto! A veces nos arranca la sonrisa de cuajo... y al minuto siguiente nos la devuelve con creces! Al fin y al cabo, la vida es como un gran hotel con una puerta giratoria de entrada, por la que continuamente entran y salen diferentes huéspedes y en el que no siempre podemos escojer la habitación en la que nos alojamos: la alegría o la tristeza, la felicidad o la infelicidad! Hay habitaciones de todo tipo... y dificilmente repetiremos más de una vez la misma habitación. Para conocer mejor el hotel habrá que pasar por sus diferentes habitaciones, aunque en cada una de ellas no permanezcamos más que unos días! Así es la vida plena, llena de habitaciones de todos los tamaños, colores y decoraciones y en diferentes plantas!
Y hoy, querido Marc, eres un nuevo y esperado huésped de este gran hotel que es la vida, en el que se alojan muchos otros huéspedes y donde se te esperaba con ilusión! Quizás cuando crezcas descubrirás que el servicio y los empleados del hotel son mejorables, en el que casi todo está por hacer porque se aprende día a dia, pero para eso has llegado a aquí: para traer la alegría a los que te rodean, para enseñarles a sufrir con sentido, para mejorar... y para que, al fin, seas capaz de crear tu propia felicidad y compartirla con los demás huéspedes, mejorando este gran hotel que es la vida!
Gracias por llegar, Marc, te estábamos esperando... con una sonrisa! ;-)
Miguel Benavent de B.
